Un tribunal marroquí ha condenado a penas de hasta diez años de cárcel a tres jóvenes por tratar de violar a una menor de 16 años y grabar y difundir las imágenes de la agresión, una pena sin precedentes en Marruecos para una violación no consumada. La pena más dura fue para el autor de la agresión, de 21 años, mientras que su compañero fue condenado a ocho años por grabar la escena.