El número de muertos causados por el ciclón Idai en Mozambique ascienden ya a más de 200, informó ayer el presidente del país, Filipe Nyusi, quien declaró una «emergencia nacional» por ese desastre que ha devastado pueblos y ciudades. Nyusi divulgó esa cifra y declaró la emergencia tras una reunión extraordinaria del Gobierno celebrada en la ciudad portuaria de Beira (centro), devastada en un 90 por ciento por el ciclón, que tocó tierra cerca de la urbe este jueves, y una de las más grandes de Mozambique. «Venimos aquí con 84 (muertos contabilizados), pero después en el terreno fuimos viendo que estamos ya en más de 200, y no sólo eso, sino que también hay 350.000 ciudadanos que se encuentran en situación de riesgo», subrayó el presidente.

Debido a la tragedia, el Consejo de Ministros decretó el luto nacional en la República de Mozambique por un período de tres días. El Ejecutivo se reunió en Beira para sentir de cerca el drama que viven más de medio millón de personas desde hace cinco días en una ciudad casi fantasma, donde las casas están destruidas, no hay agua potable ni energía eléctrica.