Sophie Power no ganó la carrera en la que participaba, el ultra de Mont Blanc. De hecho ocupó el puesto 99. Pero sin duda se convirtió en protagonista al finalizar su actuación de 43 horas en una de las pruebas más duras de su deporte, en una ruta por Francia, Italia y Suiza.

Primero, porque llegó a la línea de meta acompañada de sus dos hijos, el mayor agarrado de la mano y el pequeño, casi recién nacido, en brazos.

Y después, porque tras un esfuerzo de 171km apenas tres meses después del parto, protagonizó una imagen viral en la zona de avituallamiento: Sophie era fotografiada dando el pecho a su bebé.

El momento se compartió en Strava, una red social para atletas, y se ha convertido en viral en unos días. "Fue agónico!", dice la atleta. "Qué alivio que tuviera hambre". Ella misma compartió la escena con su familia después de una dura prueba. "Es la mejor foto de mi carrera", decía en sus redes sociales.

La atleta británica cuenta que solía parar cada tres horas para alimentar al pequeño Cormac, de tres meses, pero en el último tramo tardó 16 en alcanzar Courmayeur, en Italia, donde su hijo le esperaba.

"No puedo ir muy rápido porque mi cuerpo todavía no está preparado para quemar grasa, y además tenía que tener cuidado con la pelvis. En otras circunstancias habría estado más rápida para ir parando en diferentes sitios, pero aquí tenía que centrarme en tener suficiente comida para mí y para mi hijo. Y descansar".

Ella misma la compartió como la "mejor fotografía" de su carrera. Y a continuación, añadió una nueva imagen: "Probablemente sea mi segunda foto favorita. He dormido 20 minutos en las últimas dos noches sabiendo que Donnacha estaría conmigo en la meta".

Emocionada con su logro, dijo que el reto había sido pasar dos días consigo misma en las montañas, centrada en colocar bien los pies y tener un descanso mental.

Por último, compartió un vídeo de su preparación mientras estaba embarazada.