Un cura católico fue asesinado ayer viernes en un centro salesiano Don Bosco en la ciudad de Bobo Dioulasso, suroeste de Burkina Faso, a manos de un antiguo cocinero que trabajó en la congregación, confirmó el Gobierno burkinés.

«Los primeros indicios de la investigación revelan que este acto estaría ligado a un despido que (el cocinero) consideraba abusivo», detalló el Ministerio de Comunicación en un comunicado.

El sacerdote, identificado en medios locales como el padre Fernando Fernández, fue apuñalado al mediodía durante la comida por el presunto autor, un excocinero que trabajó en el centro religioso 7 años.