La Armada realizó ayerun ejercicio de lanzamiento de misiles antiaéreos en el Golfo de Cádiz en el que participaron las fragatas Santa María, Navarra y Canarias, de la 41ª Escuadrilla de Escoltas basadas en Rota (Cádiz).

El contingente fue apoyado en tareas de vigilancia por la fragata Almirante Juan de Borbón, perteneciente a la 31ª Escuadrilla de Escoltas con base en Ferrol, así como los buques de la Fuerza de Acción Marítima, los patrulleros Vigía y Medas y el remolcador La Graña, con base en Cádiz, y P-101, con base en Huelva. En una nota de prensa, la propia Armada señaló que mediante este tipo de adiestramientos, se busca «comprobar el correcto funcionamiento de los sistemas de detección y de armas» --dirección de tiro, lanzador, programas--, así como probar la eficacia de los misiles antiaéreos Standard SM-1.

Además, estos ejercicios han servido para «elevar la preparación de las dotaciones de los buques en enfrentamientos antiaéreos con misil y con artillería principal».

DIEZ LANZAMIENTOS / Durante el ejercicio, las fragatas de la 41ª Escuadrilla han efectuado diez lanzamientos de misiles actuando contra blancos aéreos teledirigidos tipo Scrab, de fabricación española, que simulan diferentes perfiles de ataque de aviones o misiles que se aproximen a la fuerza naval.