Comprar -hipoteca mediante- sigue siendo la opción prioritaria para la mayoría de los españoles en materia de vivienda, según constata el barómetro de junio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) hecho público ayer. El 44,4% de los encuestados ya la tienen pagada y el 25% todavía están abonando las cuotas al banco. La opción del alquiler a precio de mercado es la escogida por el 15,6% de los encuestados, mientras que apenas el 3% tienen una renta inferior al precio de mercado. La mitad de los inquilinos (45%) esgrimen la falta de ingresos suficientes como principal motivo para alquilar una vivienda en lugar de comprarla.

El 82% de la población prefiere comprar antes que alquilar y el 90% admite que el derecho de todos los españoles a tener una vivienda digna debe estar protegido «de manera activa» por el Gobierno. ¿Cómo? El 42% de los sondeados están convencidos de que una de las vías principales sería establecer una política de limitación de precio de los alquileres, algo que ya se aplica en París y en Berlín.

Solo el 24% de los españoles aseguran que el precio de los alquileres es ajustado. Para el 16% son muy caros, y para el 36%, caros. El 21% de los sondeados tienen la sensación de que las rentas están subiendo mucho (el 27% afirma que están subiendo «algo»). La mayoría achaca la subida a dos motivos: escasez de pisos de alquiler y especulación.

La encuesta del CIS revela que los españoles consideran que, además de limitar el precio del alquiler, hay otras soluciones políticas para proteger el derecho a la vivienda. La que más consenso tiene es la construcción de viviendas sociales (53%). Obtener préstamos baratos para comprar un piso (50%) y fomentar el parque público de viviendas en alquiler (38%) son otras de las posibilidades mencionadas.