Ya existen estudios que demuestran lo que muchos ya sabían (y el resto sospechaban): pasamos casi el mismo tiempo conectados -a un dispositivo móvil, al ordenador...- que interactuando con otras personas cara a cara. Y es que los smartphones se han convertido en el tercero en discordia en las relaciones de pareja y casi la mita de los usuarios, hasta un 40%, sienten que su pareja dedica más atención a su propio dispositivo que a ellos cuando están a solas.

La práctica del phubbing -o ignorar a alguien por el uso del teléfono móvil- está documentada en numerosos estudios, como el de McAfee, que asegura que un 38% los consultados pasan la misma cantidad de tiempo conectados que interactuando con otras personas cara a cara. Además, el uso excesivo de nuestros dispositivos está modificando tanto las relaciones de pareja como las dinámicas familiares.

A la hora de establecer esas relaciones de pareja, las cifras tampoco son favorables, y un 33% siente que tiene que competir con el teléfono de la otra persona en la primera cita. Y hasta un 45% de los encuestados confiesan haber discutido con un familiar, amigo o incluso con su pareja por estar conectado cuando está con esa persona.

Seguridad en entredicho

Si bien es cierto que esta dependencia de los teléfonos móviles afecta a las relaciones sociales, la adicción a estos dispositivos llevada al extremo también puede comprometer la seguridad.

Los móviles se han convertido en la opción preferida de los ciberatacantes para recabar información y monitorizar a las víctimas. Los datos que almacenan los dispositivos móviles pueden proporcionar acceso a los cibercriminales a cuentas bancarias y datos confidenciales, entre otros.

Ante esta "avalancha de información", como expresa el Product Partner Manager Consumer and Mobile de McAfee, Francisco Sanco, "debemos concienciar a los usuarios de la importancia de proteger sus dispositivos si quieren garantizar la seguridad de sus datos", explica en un comunicado.

Los atacantes no son ajenos a esto y están centralizando sus esfuerzos en vulnerar este tipo de sistemas. Según el último informe de amenazas de McAfee, Mobile Threat Report 2018, se han detectado más de 16 millones de infecciones de 'malware' móvil en el tercer trimestre del 2017.

Para hacer frente a estas amenazas y mejorar la protección de lossmartphones, es necesario establecer contraseñas "seguras y complejas", pero hay que ser conscientes de lo que se almacena en el móvil y eliminar los datos personales innecesarios para evitar en lo posible "comprometer la seguridad".

Por último, y a pesar de que cada vez es mayor la dependencia a los smartphones, hay que entender que "el móvil no es lo más importante" y resulta "fundamental" desconectarse de vez en cuando.