La Policía Nacional y la Guardia Civil han detenido a 18 personas y desmantelado un entramado que falsificó unas 50.000 recetas para comprar en España benzodiacepinas, un medicamento que vendían después en Marruecos, cuyo principio activo se utiliza para elaborar una droga conocida como karkubi. Esta sustancia estupefaciente, consumida en los estratos sociales más desfavorecidos de Marruecos, provoca alucinaciones y conductas psicopáticas. La trama, que falsificó en dos años unas 50.000 recetas, adquiría las pastillas, a través de pasadores, en oficinas de farmacia de prácticamente todo el territorio español, según las fuentes, que han indicado que los compradores residían principalmente en Algeciras y Ceuta.