El tiempo dio una cal y otra de arena para los día grandes de la Semana Santa en Andalucía. En Sevilla, la lluvia respetó la Madrugá (no así el Jueves Santo, arruinado por la impresionante tromba de granizo caída por la tarde, que ocasionó más de 300 incidencias en la capital hispalense) y el Sábado Santo, pero castigó a las siete hermandades del Viernes Santo sevillano, sobre todo por una fuerte tromba de agua que descargó por espacio de casi dos horas sobre la capital hispalense. La situación hizo que se quedasen sin salir la Carretería, la Soledad de San Buenaventura, El Cachorro, La O, San Isidro, La Mortaja y Montserrat, tras pedir algunas de ellas, como La O, una hora de moratoria para realizar su estación de penitencia. Ayer hicieron estación de penutencia cinco cortejos procesiones, los de El Sol, Servitas, La Trinidad, El Santo Entierro y la Soledad.
En cuanto a la Madrugá, y a pesar de los pronósticos de agua, se desarrolló sin incidentes y con todas las hermandades en la calle. La de los Gitanos fue la última en recogerse, después de que la Macarena adelantara media hora la entrada en su basílica de sus dos pasos: el de la Esperanza y el del Señor de la Sentencia, con lo que sobre las 13 horas del viernes ya había terminado su procesión, ante miles de personas concentradas en torno a su templo.
Media hora después, el Cristo de las Tres Caídas y la Esperanza de Triana entraban en su capilla de la calle Pureza, abarrotada de público desde primera hora de la mañana para ver en vivo la llegada de esta popular cofradía. Junto a Los Gitanos, La Macarena y la Esperanza de Triana, también el Silencio, el Gran Poder y El Calvario pudieron realizar sus estaciones de penitencia en una Madrugá sin incidencias graves.
Por lo demás, la Madrugá se saldó con 65 asistencias sanitarias de las cuales no ha trascendido ningún caso grave, varios establecimientos denunciados por incumplimientos de la normativa, un dron requisado cuando el responsable del mismo intentaba que sobrevolase la salida de la hermandad de la Macarena y al menos tres actuaciones en materia de seguridad ciudadana.
EL SEÑOR DE GRANADA / En Granada, miles de fieles se congregaron el Viernes Santo en el Campo del Príncipe del histórico Realejo para implorar con tres oraciones que el Cristo de los Favores, considerado como Señor de Granada, les conceda tres gracias en un acto centenario marcado por el mal tiempo.
La imagen del Cristo de los Favores congregó a varios cientos de personas en una jornada de cielos grises y nubes que respetó uno de los actos más peculiares de la Semana Santa granadina y permitió que la imagen de la Soledad de Nuestra Señora recorriera su barrio para acompañar a la del Cristo. Los fieles recordaron la muerte de Jesús en un acto tradicional que se repite desde principios del siglo pasado junto a la talla que preside desde el siglo XVII esta histórica plaza.
Cientos de personas volvieron a mezclar devoción y plegarias en este acto tradicional que recuerda la muerte de Jesús junto a la perenne imagen del Cristo de los Favores, considerado el Señor de Granada y que lució engalanado con flores rojas.
El sonido de un cornetín del músico Javier García marcó las tres de la tarde, -la bíblica hora nona a la que murió Jesús- y contagió de silencio a los turistas y fieles. Tras tres minutos de silencio, el arzobispo de Granada, Javier Martínez, dirigió el rezo de las cinco llagas de Cristo en el acto más tradicional y propio de la Semana Santa granadina.
‘El abuelo’, en Jaén / Nuestro Padre Jesús Nazareno, popularmente conocido como El abuelo, salió durante la madrugada del Jueves al Viernes Santo de la Iglesia de San José de Jaén, el Camarín, pero las previsiones de lluvia hicieron que la Cofradía decidiese recortar el recorrido de vuelta al santuario, siguiendo por plaza San Ildefonso, Ignacio Figueroa, Bernabé Soriano, Campanas y Carrera de Jesús.
Desde antes de las dos de la mañana, cientos de personas se dieron cita un año más para ver la salida de la imagen más venerada de la Semana Santa jiennense, que hizo su aparición a las 2.47 horas. Incluso, a pesar de las lluvias caídas sobre la ciudad durante toda la tarde que impidieron que las procesiones previstas del Jueves Santo hicieran su estación de penitencia, pudo protagonizar uno de los momentos más emocionantes de su recorrido, el encuentro con María Santísima de los Dolores, que tiene lugar tradicionalmente en la plaza de Santa María, frente a la Catedral.
La imagen de El abuelo entró antes de las 13.00 horas, su horario oficial, en el Camarín, donde se encuentra la imagen renacentista desde noviembre de 2009, después de haber estado durante 39 años en la Catedral de Jaén. Precisamente, de la Iglesia de San José, surgió en 1588 una de las hermandades con más cofrades de Andalucía y una de las tres más numerosas de España, que cuenta incluso con hermanos en Jamaica. El apodo de la imagen renacentista de Nuestro Padre Jesús Nazareno, del siglo XVI, se debe a la leyenda popular de que fue un abuelo anónimo el que durante una sola noche talló de un tronco la figura, de autor desconocido, con dos versiones distintas sobre su origen, una basada en la leyenda y otra en documentos, que apuntan a que se hizo gracias a la donación de varios labradores.
La Virgen de los Dolores, una talla de 1741 obra de José de Medina, aguarda en el Camarín hasta iniciar su recorrido sobre las 4.45 horas, de esta forma se encuentra casi dos horas después, en la Plaza Santa María, con la imagen de El abuelo.
