Un día a priori de una afluencia de espectadores moderada y con una temperatura casi veraniega que hubiera resultado ayer perfecto para comenzar a consolidar la nueva carrera oficial, trasladada este año al entorno de la Mezquita-Catedral, de no ser por un incidente que fue creando más problemas en cascada.

Aunque ya antes hubo un conflicto en accesos (en torno a las 21.15, en la Puerta del Puente), el incidente más trascendente del Lunes Santo fue una aglomeración de público en torno a las 21.30 horas en la zona de la Cruz del Rastro, justo cuando la primera de las hermandades que había pasado por la carrera oficial, la de La Merced, tomaba la calle San Fernando camino de su barrio del Zumbacón.

La aglomeración de personas ralentizó el cortejo e impidió que la hermandad de Remedio de Ánimas, que llegaba desde la plaza del Potro, pudiera acceder a La Ribera. Así, en la carrera oficial llegaron a coincidir hasta cuatro cruces de guía de distintas cofradías, ralentizando enormemente los tiempos de paso, comprimiendo a las hermandades en sus cortejos y haciendo que en algunas ocasiones (como ya pasara el Domingo de Ramos) las marchas de las agrupaciones musicales se solaparan.

A lo largo de la noche, y conforme se fueron despejando las zonas más congestionadas, las hermandades continuaron con sus itinerarios previstos, intentando recuperar tiempos, que en ocasiones habían llegado a superar la hora de retraso. Sobre las 1.15 de la madrugada, prácticamente se había normalizado la situación con La Merced y Vera Cruz en sus respectivos templos, Ánimas aún con un cierto retraso, y el Vía Crucis y La Estrella camino de sus sedes. Por otro lado, la Agrupación de Cofradías informó ayer que el Domingo de Ramos el dispositivo sanitario desplegado realizó 46 actuaciones.

ESTAMPAS ÚNICAS / También es cierto que la nueva carrera oficial siguió ayer proporcionando estampas para el recuerdo y la pequeña-gran historia cofrade, con el reencuentro de la Merced con La Catedral (que hacía recordar los años en los que entraba en ella en La Madrugá), la entrada del Cristo de Remedio de Ánimas en la Catedral (una esperadísima imagen en esta ya de por sí Semana Santa de novedades) o el paso de la Estrella por los Jardines de la Agricultura camino de Fléming y el Campo Santo de los Mártires, que se consolidó ayer como gran arteria cofrade de la nueva Semana Santa con el paso de tres de las seis hermandades del día. También el entorno de La Ribera y el río Guqadalquivir volvió a proporcionar, especialmente a la caída de la tarde, imágenes inéditas y de extraordinaria belleza. Al respecto, hay que recordar que la nueva carrera oficial obliga a que todas las hermandades tengan que pasar junto al río para entrar en la carrera oficial, bien por Ronda de Isasa, desde Santa Teresa Jornet o llegando desde el Puente Romano.

ESTRENOS TAMBIÉN ‘HISTÓRICOS’ / Capítulo aparte, todo se conjugó ayer para que en un año en el que la carrera oficial impone enormes novedades, las hermandades del Lunes Santo mostraran estrenos de tanta calidad como el nuevo Senatus de la Merced, la gloria del techo de palio de la Virgen del Dulce Nombre, la nueva saya de la cotitular de Ánimas y la túnica de Jesús de la Redención que ya lució en el reciente vía crucis de la Agrupación de Cofradías, pero que por primera vez procesionaba en Semana Santa. Sin embargo, fue una reliquia, la del Lignum Crucis, entregada recientemente a la hermandad de la Vera Cruz por el Marqués de Vivanco, fue la que quizá acaparase más la curiosidad y la atención popular en su relicario dentro de la propia cruz de guía.