El perfil de la persona que sufre adicción a los juegos de azar ha cambiado mucho en los últimos diez años. Si antes era una persona de entre 40 y 50 años, que jugaba a las máquinas tragaperras en bingos y salas de juegos, en los últimos tiempos la edad del jugador al que esa actividad le afecta negativamente a su salud, a su economía, a su trabajo y a sus relaciones familiares y sociales, es preferentemente el de un hombre de 25 años en adelante (e incluso menores de edad) que apuesta on line a través de tabletas, ordenador o aplicaciones móviles o que se pasa las horas enganchado a juegos de internet. También está el grupo, formado más por mujeres, que compra compulsivamente o llama a números de teléfono (como, por ejemplo, el tarot) que tienen una tarifa abusiva.

La Asociación Cordobesa de Jugadores en Rehabilitación (Acojer) celebra durante toda esta semana, en su sede de Agrupación Córdoba, actividades informativas para prevenir estas adicciones, con motivo del Día sin Juego de Azar, que se conmemora el 29 de octubre. A la inauguración asistieron la delegada de Salud, María Ángeles Luna; la alcaldesa, Isabel Ambrosio; la vicepresidenta primera de la Diputación, Felisa Cañete; varios concejales, entre otras autoridades.

El presidente de Acojer, Salvador Secilla, criticó que «las administraciones no regulen la publicidad abusiva de las apuestas y del juego que aparece en los medios de comunicación, en especial en retransmisiones deportivas, y el hecho de que jugadores que son ídolos de masas como Ronaldo o Nadal protagonicen estos anuncios». La semana cultural de Acojer comenzó ayer con una conferencia de la psicóloga del Instituto Andaluz de la Mujer Carmen Salido, que expuso que más de la mitad de las mujeres que sufren algún tipo de adicción, principalmente a sustancias nocivas, aunque también al juego de azar tradicional u on line, son, a su vez, víctimas de violencia de género. Salido demandó «la necesidad de contar con un protocolo por parte de todas las instituciones para efectuar un abordaje multidisciplinar de este doble problema y dar una mejor respuesta a las necesidades de las afectadas. Se trata de situaciones que estas mujeres tratan de ocultar, ya que presentar una adicción les supone un motivo de vergüenza, que se añade a su condición de víctima de violencia de género».

Dentro también de esta semana de Acojer, mañana, a las 20.00 horas, habrá una ponencia sobre acoso escolar, a cargo del inspector de Policía Nacional Antonio Valdivia. Y el viernes esta asociación instalará varias mesas informativas.