La consejera de Salud, Marina Álvarez, ha visitado el nuevo hospital de día de alergia, en el Hospital Provincial del Reina Sofía, cuyas instalaciones también han sido recientemente renovadas y ampliadas, pasando de 25 a 60 metros cuadrados de superficie. Estas actuaciones permitirán incrementar el número de pacientes alérgicos atendidos y mejorar la calidad de los servicios prestados.

Por este hospital de día pasan anualmente entre 250 y 300 pacientes y a partir de ahora incrementará su capacidad para atender a pacientes alrededor de un 50%. Aquí se realizan procedimientos diagnósticos y terapéuticos de riesgo, así como atención alergológica a pacientes de alta complejidad. Entre las áreas que se han incorporado se incluye un despacho médico independiente, un almacén e instalaciones confortables que incluyen aseo y vestuario independientes para pacientes y profesionales.

El principal objetivo de esta unidad es poder controlar las complicaciones -fundamentalmente anafilaxia- que puedan sufrir los pacientes alérgicos mientras reciben tratamiento. Para ello, el hospital de día alergológico es atendido permanentemente por un médico alergólogo y una enfermera y se encuentra conectado con la unidad de cuidados intermedios de reanimación anestésica. Su tamaño reducido lo dota de una gran flexibilidad, permitiendo la programación de sesiones específicas según necesidad (por ejemplo, permite agrupar pacientes que participan en un mismo ensayo clínico o agrupar niños separados de adultos).

La inmunoterapia agrupada con veneno de insectos himenópteros y el test de repicadura -teniendo en cuenta que el hospital Reina Sofía es uno de los centro de referencia andaluz para estas técnicas- son los principales procedimientos que se llevan a cabo, a los que se suman otros como la desensibilización a quimioterapia antineoplásica en pacientes oncológicos alérgicos a fármacos necesarios para su tratamiento antitumoral, la desensibilización a alimentos y la exposición controlada tanto a medicamentos como a alimentos.