La Asociación de Allegados y Personas con Enfermedad Mental de Córdoba (Asaenec) ha presentado esta mañana una curiosa iniciativa de sensibilización sobre las enfermedades mentales, “con la que se trata de eliminar el estigma que aún pesa sobre las personas que sufren alguna de estas patologías, que afectan a un 25% de la población en algún momento de su vida, según los últimos estudios, y que además van en aumento”, indicó el presidente de Asaenec, Antonio Garrido. Gracias a la colaboración del estudio de comunicación Alas6enlaPlaya, en la céntrica calle Cruz Conde se ha instalado una cabina telefónica rosa con un teléfono azul, que durante todo el día de hoy permite descolgar el auricular y conocer de este modo las historias y reflexiones en torno a la vida y la enfermedad de cinco personas que padecen una patología de esta clase, además de poder intercambiar impresiones con ellas porque se encuentran allí físicamente junto a la cabina.

Concretamente son los testimonios de Gabriel, Pepe, Magda, Rosa y David, que además de en la calle Cruz Conde se pueden escuchar en la página web www.asaenec.org. César de Torre, CEO de Alas6enlaPlaya, expuso que “con esta campaña tratamos de sacar a la calle la realidad en la que viven las personas con enfermedad mental. A través de esta cabina de teléfono rosa abrimos una ventana para que la sociedad escuche en locuciones de 90 segundos lo que tienen que decir estas cinco personas con enfermedad mental. Se trata de una especie de experimento sociológico, con el que buscamos poner rostro a una realidad estigmatizada a los que la sociedad no les presta atención. Hay personas que ya han pasado hoy por aquí y conocido alguna de estas historias, sintiéndose identificados en parte con lo que se cuenta o extrapolando ese relato a algún familiar o conocido que también podría padecer una enfermedad mental”. “Con todo este trabajo vamos a hacer un vídeo que recogerá el debate que pueda generar esta experiencia”, destacó De la Torre.

Pepe, que es uno de los usuarios de Asaenec cuyo testimonio se puede escuchar en el teléfono de la cabina rosa, manifestó que la enfermedad mental llamó a su puerta cuando él tenía algo más de 40 años y gracias a la ayuda de Asaenec y los talleres, rehabilitación y demás prestaciones que ofrecen “me siento muy bien, mejor cada día”. Por su parte, Gabriel, otro de los protagonistas de esta iniciativa, relató que “siempre me he sentido rechazado, desde niño y además poco querido en el colegio y en el trabajo”. Gabriel padece un trastorno bipolar y, debido a la falta de atención especializada que necesitaba, cayó en una serie de adicciones, que con la ayuda de Asaenec y el apoyo incondicional de Araceli, su madre,, ha ido superando.

El presidente de Asaenec animó a cualquier persona que crea que pueda padecer una enfermedad mental que se acerque por esta asociación, ya que cuenta con una amplia oferta de servicios adaptados a cada situación, “ya que con la pertinente asistencia se puede convivir mejor con estas patologías”.