El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa que puede matar y causar ceguera, sordera o daño cerebral. Se puede prevenir recibiendo dos dosis de una vacuna, que en el caso de Andalucía, está incluida de forma gratuita, dentro del calendario vacunal de la sanidad pública andaluza, a los 12 meses y a los 3 años. Sin embargo, la existencia de crecientes bolsas de población de personas no vacunadas en el continente europeo, Estados Unidos o Asia está disparando el número de casos de esta enfermedad, pero también de otras como la rubeola que estaban prácticamente erradicadas en naciones desarrolladas.

Sin embargo, el director del Plan Estratégico de Vacunaciones de Andalucía, David Moreno, afirma que en esta región no se está dando repunte de afectados por sarampión, debido a que la tasa de cobertura vacunal entre los 0 y 3 años es del 97%. Según Moreno, en lo que va de año en Andalucía se han registrado cuatro casos de sarampión, frente a los casi 100 de Cataluña y 219 en España. De esos cuatro afectados en Andalucía, uno fue importado de una persona que vino de fuera y contagió el sarampión a las otras tres. Moreno resalta que en Andalucía no ha habido seguramente ningún brote especial de sarampión, ya que la alta cobertura vacunal ayuda a que los casos que puedan producirse no se expanden porque la población del entorno está vacunada. Y, es que a pesar del auge en España del movimiento antivacunas (de personas que deciden no vacunar a sus hijos), en Andalucía estos grupos son pocos y se concentran más en la costa, donde reside población extranjera, o en zonas más excluidas del sistema sanitario. Este experto recuerda que en Andalucía hubo sendos brotes de sarampión en el 2010 en Sevilla y Granada y que en esta segunda provincia un juez obligó a vacunar a decenas niños para evitar un problema de salud pública.