Las elecciones municipales del 26M pintaron un nuevo mapa político en la provincia de Córdoba, en el que el PSOE volvió a ser la fuerza más votada. En concreto, los socialistas lograron el 34,43% de los votos (139.050 papeletas) y 405 concejales en la provincia; frente al 28,71% que dio su apoyo al PP (115.956 votos), que logró 260 ediles; el 14,18% cosechado por IU (57.291) le dio 135 representantes; Cs con 7,98% (32.210 escrutinios) consiguió 22 concejales; mientras que los partidos independientes obtuvieron el 14,80% del escrutinio.

En general, los resultados de los partidos respecto a las municipales del 2015 supusieron un ascenso de los socialistas en porcentaje de votos, al pasar del 32,96% al 34,43% (no así en votos ni en concejales, ya que pierde uno); una subida en votos y concejales del PP (unos 8.700 votos y tres concejales más); la caída de IU, con 9 concejales menos en la provincia; y un importante ascenso de Cs, que pasó de tener 5 representantes a 22 el 26 de mayo.

MAYORÍAS ABSOLUTAS

En 59 municipios cordobeses, algunos de los partidos que se presentaron a los comicios lograron mayoría absoluta, mientras que en otros 18 ayuntamientos precisaron del acuerdo de dos o más fuerzas políticas para ser gobernados los próximos cuatro años. Así, de los 59 primeros municipios, el PSOE gobierna desde el 15 de junio --día de la investidura de las corporaciones locales-- en un total de 33 pueblos de la provincia; el PP lo hace en 11, IU, en 10 y los partidos independientes, en cinco. Entre los municipios en los que solo se consiguieron mayorías relativas, los socialistas fueron los más votados en 11 ayuntamientos, los populares en dos, IU, en tres, mientras que los grupos independientes obtuvieron más apoyos que el resto en dos municipios cordobeses.

En cuanto a los ocho municipios con más población de Córdoba, a excepción de la capital, donde vencieron los populares de José María Belllido, el PSOE fue la fuerza más respaldada en cinco de ellos: Lucena, Palma del Río, Puente Genil, Montilla y Baena, si bien solo ha obtenido mayoría absoluta en Montilla, por lo que el alcalde, Rafael Llamas, no tuvo que mantener la alianza de gobierno con IU.

El PP, por su parte, ganó las elecciones en Cabra, Priego y Pozoblanco y en todos ellos gobierna con mayoría absoluta. El popular Fernando Priego fue el alcalde que más apoyos recibió en las elecciones del 26 de mayo (el 62,43% de los votos de los egabrenses), mientras que la mayoría absoluta más amplia fue la conquistada por Carmen Flores, alcaldesa de Aguilar de la Frontera, que protagonizó una remontada história arrebatándole la Alcaldía a los socialistas.

En Priego, la cómoda victoria que cosechó el 26M María Luisa Ceballos certificó el rechazo del municipio al acuerdo tripartito que desalojó al PP del gobierno municipal. Y en Pozoblanco, el PP de Santiago Cabello supo capitalizar y gestionar el acuerdo con la agrupación de electores Pozoblanco en Positivo por el que Emiliano Pozuelo --ahora parlamentario andaluz de Cs-- fue alcalde los dos primeros años del mandato y Cabello estos dos últimos. Otra de las sorpresas electorales la protagonizó La Rambla, donde el popular Jorge Jiménez se hizo con la vara de mando por primera vez en la historia. En Castro del Río, con un empate de IU, PP y PSOE con cuatro concejales, la campanada la terminó dando en el último momento la independiente María Ángeles Luque, gracias a los votos de PP y tres de los ediles socialistas.