Las expresidentas de la comunidad de Madrid Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes fueron imputadas el pasado septiembre en la macrocausa de corrupción Púnica. El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón pretendía conocer su papel en la trama liderada por el exconsejero madrileño Francisco Granados y en la financiación irregular del PP madrileño entre los años 2003 y 2011, en los que Aguirre encadenó mayorías absolutas. En el caso concreto de esta última, consideraba que supervisó la supuesta caja b del partido en la comunidad.