Internet de las cosas (IoT) es una realidad: las universidades empiezan a formar a los primeros expertos; empresas e instituciones invierten en su implementación; los ciudadanos cada vez tienen más confianza en su aplicación; y lo más importante: el mundo ya disfruta de sus beneficios.
Y solo es el principio: las predicciones dicen que en 2023 se esperan que las conexiones del internet de las cosas alcancen los 3.500 millones. Pero… ¿Qué significa todo esto? IoT permite conectar en red no solo a personas, sino también a objetos, electrodomésticos o vehículos en una red infinita. ¿Aún hay dudas? El internet de las cosas posibilita que una nevera controle la dieta y las compras; que un monitor avise cuando haya un problema de salud; o que en la calle se pueda comprobar cuál es la calidad del aire. En definitiva, el IoT ofrece la posibilidad de conectar objetos, más allá de computadoras o teléfonos inteligentes, a la red.
Estudio
En este nuevo mundo de interconectividad, empresas como Telefónica están demostrando su compromiso en la implementación del IoT.
La compañía de telecomunicaciones presentó su segundo estudio sobre internet de las cosas, 'Things Matter 2019: la experiencia del usuario de IoT en España', que en la presente edición, vuelve a reflejar la realidad de lo que la ciudadanía piensa sobre el internet de las cosas y presenta, esta vez, como novedad, la voz de los responsables de la transformación digital en empresas de distintos sectores de la actividad industrial, comercial o institucional. “La esencia de la segunda edición de este informe es aportar un conocimiento mayor sobre la relación entre los usuarios y las cosas conectadas; continuar contribuyendo al compromiso de todos los que participamos de la revolución IoT, sea cual sea el papel que juguemos en ella. En definitiva, continuar descubriendo las nuevas posibilidades que las cosas conectadas nos abren en este mundo en plena transformación”, destacó Vicente Muñoz, responsable global de IoT Telefónica.
Resultados
El informe presenta diferentes resultados que confirman que el IoT ya es una realidad en el día a día. Por ejemplo, la mitad de la población ya conoce lo que significa; mientras que los usuarios que usan dispositivos conectados y sus aplicaciones ha crecido un 66% respecto al estudio de 2017. Además, la encuesta desvela que un comportamiento habitual después de probar IoT consiste en no renunciar a su uso, como reconocen el 87% de los usuarios.
La experiencia del usuario plasmada en el informe de Telefónica también explica cuáles son los dispositivos conectados que más se usan. Destacan los relojes inteligentes, los electrodomésticos y enchufes inteligentes, las aplicaciones de control de accesos y eficiencia energética en el hogar, las aplicaciones de coche compartido y de estacionamiento urbano, los 'trackers' y los coches conectados, los cuales, desde la encuesta de 2017, se han erigido en uno de los grandes motores de la evolución del IoT. Los usuarios que lo han probado valoran la posibilidad de crear una red wifi en su interior, así como el incremento de la seguridad ya que pueden obtener información completa, tanto del entorno, como del vehículo y, al mismo tiempo, evitar situaciones de riesgo.
El informe 'Things Matter 2019' de Telefónica también ha revelado cómo los usuarios relacionan el internet de las cosas con palabras como seguridad, control, comodidad o conectividad. De hecho, los encuestados están empezando a apreciar los beneficios del IoT, en términos de ahorro energético y eficiencia.
La industria, motor IoT
Desde el punto de vista de las industrias, actualmente, es el sector que más está apostando por la implementación de soluciones IoT.
Es importante destacar que se trata del motor que impulsa en mayor medida la implantación de las soluciones del internet de las cosas. Los beneficios que encuentran el conjunto de las empresas se resumen en tres pasos: conectar para conocer e interactuar.
Por último, el estudio desvela que el crecimiento del internet de las cosas ha ido acompañado de un mayor compromiso de los ciudadanos en aspectos como la sostenibilidad y la seguridad.
Todo estará conectado en las ciudades
►Puerto conectado. Coordinación eficiente de todos los agentes que interactúan y mayor nivel de seguridad y prevención ante las variables ambientales.
►Fábrica conectada. Redes privadas que permiten diseñar plantas más eficientes, sostenibles y seguras, y mejorar la calidad de la vida laboral. 1 PB (un peta byte) al día.
►Gestión del transporte público. Sensores en los medios de transporte para facilitar la movilidad de los usuarios y la fluidez del tráfico.
►Gestión medioambiental. Ciudades cada vez más habitables, gracias al uso de sensores de calidad atmosférica y del agua. 10 MB/día.
►Hospital conectado. Agilizar la respuesta para beneficio de los pacientes, y optimizar los recursos hospitalarios. 5TB/día.
►Iluminación inteligente. Sensores que detectan el flujo de peatones y/o automóviles, y ajustan el uso a las necesidades reales, con una reducción probada del 64% en el consumo eléctrico.
►Hogar conectado. Con dispositivos como los enchufes o climatizadores inteligentes, para controlar el gasto energético y aumentar la seguridad y el confort.
►Coche conectado. Una conducción más segura y una experiencia más satisfactoria para todos los ocupantes. 4 TB/día.
►Infraestructuras públicas (puentes, túneles, alcantarillado, autovías...). Sensores para medir la degradación de materiales o los impactos sismológicos. Ayudan a mejorar el mantenimiento y la prevención de averías y roturas con una eficacia hasta seis veces mayor.
►Interior de edificaciones. Sensores que detectan actividad ayudan a regular el uso de iluminación, climatización y otros sistemas de ahorro energético. 275 GB/día.
►Control de accesos. Sensores con reconocimiento facial hacen más seguros los edificios oficiales y otros espacios públicos (aeropuertos, estaciones, estadios...).
►Avión conectado. Gestión inmediata de grandes volúmenes de datos para mejorar la seguridad aérea. 40 TB al día.
►Semáforos inteligentes. Sensores de densidad de tráfico, ayudan a reducir la intensidad del tráfico en un 36%.
►Redes inteligentes de recursos energéticos. De recursos energéticos con una considerable reducción de costes para el ciudadano: hasta 5GB/día.
►Tienda inteligente. En la trastienda, eficiencia en la logística y los procesos internos. De cara al público, una oferta y una comunicación cada vez más personalizadas.
►Vídeovigilancia y seguridad ciudadana. Cámaras conectadas. 50PB/día. Gestión automatizada de residuos: responde al desafío medioambiental con reducciones de costes de un 83% y aumentos de un 46% del volumen reciclado.
►Persona conectada. Información a mano y en tiempo real de todos los servicios de la ciudad vía app, y de todos los dispositivos conectados del usuario.
