Richie Porte, jefe de filas del conjunto BMC, y que era uno de los grandes favoritos para apuntarse la victoria en los Campos Elíseos de París, ha abandonado a los 10 kilómetros de la trascendental etapa de los adoquines, al verse involucrado en una caída masiva, en la que ha sido el principal perjudicado.

El corredor australiano, que también sufrió una gravísima caída el año pasado en el Tour, que le hizo pasar varios meses de rehabilitación, se ha roto la clavícula y, aunque ha intentado continuar, no ha podido y ha tenido que decidir abandonar. En su equipo corre el actual líder del Tour y campeón olímpico Greg van Avermaet. Porte llegó al Tour tras imponerse de forma magistral en la Vuelta a Suiza.