Ya en el momento de su retirada como comisionado de la NBA en 2014, el baloncesto se congratuló de despedir al mejor dirigente de su historia. Ahora, tras su muerte a los 77 años, la figura de David Stern está ya situada con honores entre las más destacadas de la historia del deporte. Ayer, aún entrecruzadas con felicitaciones de año nuevo, el baloncesto ensalzó con honores al quimérico arquitecto que levantó el rascacielos global que es hoy en día la NBA.

Durante sus 30 años de mandato emergieron la rivalidad Celtic-Lakers, la figura de Michael Jordan, el Dream Team en Barcelona 92 o la liga profesional de baloncesto femenino WNBA; amplió las franquicias a 30 y convirtió la liga en un producto global e hizo que varias generaciones soñaran con que pronunciara su nombre en el Draft. La NBA pierde una leyenda, un líder que cambió nuestro juego a mejor, publicó Pau Gasol en redes sociales después de que se hiciera pública la noticia.

Del directo al diferido

Cuando David Stern llegó a la NBA, en 1980 como vicepresidente ejecutivo y en 1984 como comisionado, la liga tenía un interés residual aún en Estados Unidos, con una imagen deteriorada por problemas de conducta, tenencia de armas, árbitros corruptos y con el consumo de drogas generalizado. David llevó las finales de la NBA del diferido al directo y entonces empezaron todos los domingos en la CBS las mejores jugadas de los Celtics de Larry Bird y mi showtime con los Lakers, escribió Magic Johnson tras la noticia, una de las grandes estrellas del baloncesto que emergió bajo el paraguas de Stern, también Larry Bird, Iverson u O'neal.

El crecimiento de la liga desde entonces ha sido ininterrumpido. Stern se retiró en 2014 y dejó una competición con un superávit anual de más de 5.000 millones de dólares, con unas franquicias que tienen 50 veces el valor que tenían en los años 80, cuando perdían dinero por competir en la liga.

La NBA no sería lo que es hoy sin David Stern, lideró la liga en tiempos turbulentos y la hizo crecer hasta convertirla en un fenómeno internacional. No estaría donde estoy sin él, transmitió Michael Jordan, estrella inmortal de la liga y actual propietario de los Charlotte Hornets.

Gestión social

Entre el crecimiento económico exacerbado, en la carrera de Stern destaca su gestión enfocada a la resolución de los conflictos sociales. Sus medidas llegaron a ir desde la erradicación del consumo de drogas entre los jugadores, en sus inicios, hasta las conductas de vestimenta que implantó ya en el siglo XXI, pero le avalan momentos clave: como el apoyo al jugador retirado John Amaechi, cuando hizo público que era gay, o a Magic Johnson: Cuando anuncié en 1991 que tenía VIH, la gente pensaba que podía contraer el virus al estrecharme la mano. Cuando David me permitió jugar en el All Star Game de 1992 en Orlando y luego jugar para el Dream Team en los Juegos Olímpicos, pudimos cambiar el mundo, publicó el base estrella de los Lakers de la época.

Licenciado en derecho en la Universidad de Columbia, David Stern llegó a la NBA después de haber ejercido con éxito la abogacía en Nueva York. Después de su jubilación, y de ser nombrado comisionado emérito de la NBA, mantuvo hasta su muerte una activa implicación en su despacho de abogados y en las inversiones en empresas emergentes de innovación.