Rafael Nadal volvió a abogar, esta vez en México, por una Cataluña que forme parte de España. El tenista malloquín, además, expresó su confianza en que la sitación política en España se calme porque "se necesita estabilidad".

Nadal se encuenta en México para disputar el Abierto de Acapulco, y hace dos días también inauguró una escuela de tenis en un resort de lujo de Cancún del empresario hotelero ibicenco Abel Matutes, hijo del exministro del mismo nombre. En una entrevista al diario 'Milenio', el tenista manacorense volvió a expresar su deseo de que Cataluña se mantenga unida a España.

"Llevo a Cataluña dentro de mi corazón, he pasado ahí muchos momentos importantes y no entiendo una España sin Cataluña, para la que es importante y positivo estar dentro del país. No veo dos cosas diferentes. Cataluña está dentro de España y a partir de ahí ya se verá", asegura el tenista, preguntado acerca de la convulsión política en España. "Hay muchos focos complicados como Cataluña y las elecciones, pero la situación se tiene que calmar, quizá no tan a corto plazo, pero se necesita estabilidad. Opino que la manera de solucionar el caso de los catalanes es la convivencia".

Sin obsesionarse por los Grand Slams

Nadal aseguró también que juega obsesionado con batir el récord de Grand Slams: "En mi mente está ser feliz y a partir de eso el objetivo es generar oportunidades para seguir sumando cosas importantes en mi carrera, pero no me enfoco en los Grand Slam, que solo son cuatro torneos al año. Voy disfrutando día a día, semana a semana de mi profesión, en la que he logrado más de lo que había soñado, así que lo venidero es para disfrutar", insistió.

El mallorquín también alaba a hornada de jovenes tenistas que está plantando cara sin complejos a la 'vieja guardia'. "No hay barrera alguna. Stefanos Tsitsipas le ganó a Roger Federer en el Abierto de Australia y Borna Coric me ha vencido a mí varias veces, por ejemplo. Más bien es competición a muy alto nivel y son partidos disputados en los que cualquier cosa puede pasar. Ellos son buenos, jóvenes y tienen un camino que recorrer". Cuando el periodista hace referencia a que tiene casi la edad de Cristo, Nadal responde: "Espero no tener un final peor...".