La expectación que ha generado esta final del play-off de ascenso a Primera es máxima en Mengíbar. De hecho, las poco menos de 1.000 localidades de las que dispone el pabellón Sebastián Moya Lorca se agotaron horas después de salir a la venta. «La cola por pillar una entrada medía un kilómetro», aseguró ayer a este periódico el director deportivo de la entidad mengibareña, Leo Moya.
Moya tiene una especial vinculación con Córdoba, puesto que durante tres temporadas vistió la camiseta del Grupo Pinar Adecor en la mejor época de la historia del club cordobés. En 2005 y 2006, el cuadro cordobés disputó dos play-offs de ascenso consecutivos a la máxima categoría, aunque en ambas ocasiones cayó eliminado en la primera eliminatoria ante Bilbo y FC Barcelona, respectivamente.
Moya estuvo el pasado sábado en el palco de Vista Alegre. «El ambiente que se respiró fue excepcional y me recordó a aquellos años de fases de ascenso con el Adecor, aunque ahora quizás haya tenido mayor seguimiento el equipo por el hecho de portar el escudo del Córdoba CF», aseguró el propio Moya, quien no dudó en recordar «el gran cariño que siempre me ha profesado la directiva y el cuerpo técnico en aquellos años, así como los aficionados a este deporte con los que sigo teniendo un contacto permanente». Moya quiso enfatizar en el hecho de que hace cuatro años ambos equipos se enfrentaban en Tercera División. «Somos dos clubs que hemos empezado desde abajo, con jugadores de la provincia y gracias al gran trabajo desempeñado por ambas entidades, ahora estamos peleando por un sueño muy grande como un ascenso a Primera; de esta eliminatoria se hablará en los próximos años».
Moya sentenció que «el gran ganador va a ser el fútbol sala andaluz. Andalucía necesita equipos en Primera puesto que hay muchos jugadores demostrando su talento lejos de casa».
