El Cajasur CBM retoma el pulso de la competición oficial disputando su primer partido del 2020 en la pista del Teucro Pontevedra. Los granates, que vieron aplazado su encuentro de la semana pasada ante el Torrelavega, han caído momentáneamente a la zona de descenso, y tienen urgencia por puntuar lo antes posible, aunque hacerlo en tierras gallegas será empresa complicada. El duelo se jugará el sábado a las 20:30 horas en el Pabellón Municipal de Deportes de Pontevedra con arbitraje de la pareja formada por el madrileño Montero Suárez y el valenciano Estellés García.
Muchas cosas han cambiado para los granates en relativamente poco tiempo, porque nadie está ajeno a contratiempos, y el final del año pasado no será recordado precisamente en el seno del CBM como afortunado. Dos bajas de larga duración como las de Ricardo Amérigo y Alberto Requena más la producida por motivos laborales de Ramón Fuentes dejaron la plantilla muy tocada, llegando como nueva alta el portero Fernando Torres y esperando que pueda concretarse alguna operación más.
Pero quizás la mejor noticia sea la recuperación total de Juanlu Moyano, que aportará potencia de lanzamiento exterior y toda la experiencia de una trayectoria muy amplia en Liga Asobal. Moyano lleva un mes y medio con el alta deportiva y ha realizado un trabajo muy exigente en este tiempo para recuperar su capacidad goleadora, aportando mayor potencial desde los nueve metros al ataque granate.
Sacar algo positivo de la pista de uno de los clubes más históricos del balonmano nacional, y quinto clasificado, no será tarea fácil ya que en palabras de Escribano “Teucro es un equipo particular, porque cuando las cosas le van bien, son capaces de hacerlo todo perfecto, pero cuando no les sale bien lo que quieren, les cuesta sacar los partidos. En ese sentido tienen un poco de irregularidad, aunque están muy bien trabajados en todas las facetas”.
De las armas principales del juego ofensivo gallego, el técnico granate apuntó que “cuentan con un contraataque bien estructurado y capacidad de lanzamiento exterior por medio de Poveda y Moyano, así como uno contra uno. Juego de cruces, apoyo con pivote y buscando espacios siempre para permitirles lanzar. En general, su juego se basa en potencia física y envergadura, por lo que son muy complicados de defender”.
Incidió Escribano como aspecto vital para intentar puntuar en Pontevedra en que los suyos “no cometan errores, porque para poder superarlos no podemos dejar que nos penalicen los errores con contraataques. No podemos caer en las pérdidas de pase y los cruces. Luego en defensa hay que estar más seguros controlando sus lanzadores y también sus salidas naturales de los uno contra uno en la primera línea”.
El portero juvenil José Pablo Jiménez será la gran novedad en la expedición granate para este encuentro.
