Ya hay un nuevo destino para uno de los iconos del balonmano cordobés. Carlos Molina ha llegado a un acuerdo con el Motor Zaporozhye para incorporarse al club de manera inmediata, por lo que el internacional abrirá una nueva etapa en su trayectoria deportiva en una entidad de rango, pues ha conquistado consecutivamente todos los campeonatos nacionales de liga desde 2013 hasta 2019. Molina militó en el último curso en el Benfica de Portugal.

Carlos Molina Cosano (Córdoba, 1991) acumula una notable carrera como profesional del balonmano, deporte en el que se inició forjándose en el inagotable vivero del Cajasur Córdoba. El lateral izquierdo pondrá un sello más en su pasaporte con la llegada a Ucrania, después de hacer escalas en Portugal con el Benfica y Alemania con el Magdeburgo.

Después de brillar en las divisiones formativas del CBM y subir todos los peldaños posibles en el club de su ciudad fue fichado por el Barcelona, con el que debutó en 2011 en la Liga Asobal. Además de haber sido internacional absoluto -disputó encuentros amistosos con la selección en 2014-, ha pasado por las filas del CAI Aragón, Huesca y Naturhouse La Rioja, todos ellos en la máxima categoría española.

En su última temporada, con el Benfica, Carlos Molina terminó en la tercera plaza en la fase regular de la liga portuguesa, alcanzó los octavos en la Copa y estaba bien clasificado en la Copa EHF, antes de pararse las tres competiciones por la crisis del coronavirus.

Con el Motor Zaporozhye, Carlos Molina podrá disputar la máxima competición continental de clubs. El cordobés no llegará a tiempo de disputar el partido que la escuadra ucraniana tiene este jueves en su pabellón ante el Barcelona, correspondiente a la primera fase de Liga de Campeones en un grupo en el que además están Aalborg, Nantes, Celje, Zagreb, Kiel y Veszprem.