La suerte está echada. La nueva Copa Davis impulsada por el futbolista del Barça Gerard Piqué ya es una realidad. El proyecto que el jugador azulgrana presentó a través de la empresa Kosmos, que fundó y preside, en la asamblea de la Federación Internacional de Tenis (ITF) celebrada en Orlando (EEUU) fue aprobado con el 71,43% de los votos a favor. La reforma de la Copa Davis, que se jugará al estilo de un gran torneo de tenis, concentrará a 18 equipos en una sede única durante una semana, a finales de noviembre, a partir del 2019.

El presidente de la ITF, el estadounidense David Haggerty, aseguró que el nuevo formato refleja lo que el Consejo de Jugadores de la ATP sugirió en 2016 y dejará 25 millones de dólares anuales para las federaciones y 20 para los tenistas. El actual sistema de Copa Davis, establecido hace 118 años, dejará paso al sistema propuesto por el grupo inversor Kosmos y respaldado por Hiroshi Mikitani, director de la empresa japonesa Rakuten, patrocinadora a su vez del Barça.

Piqué celebró a lo grande su nuevo éxito fuera del fútbol, con risas y abrazos con su equipo de trabajo, desplazado, al igual que él mismo, a la ciudad del estado de Florida. "Es un día histórico", aseguró el futbolista y empresario. El megaproyecto, que comporta una inversión de 2.500 millones de euros en los próximos 25 años, se llevará a la práctica porque obtuvo más de los dos tercios de votos requeridos de los delegados de 140 países. Solo el 28,57% de los sufragios se opusieron a enterrar una competición histórica que pasará a convertirse en un torneo de una semana. Eso sí, muy bien remunerada.

Los románticos, encabezados por Australia y Gran Bretaña, sucumbieron ante los aires de cambio auspiciados por Kosmos y Piqué y respaldados por países de tanto peso como Estados Unidos, Francia, Italia, Argentina y España. La federación española ya había mostrado en días anteriores su apoyo a la renovación total de la Davis, argumentando además que España se postula para organizar las primeras ediciones de un torneo que será itinerante. Madrid, con la Caja Mágica y el Palacio de los Deportes, puede ser la primera sede, del 18 al 24 de noviembre del 2019, puesto que es, junto a la ciudad francesa de Lille, la principal favorita.

Hay que tener en cuenta, además, que el equipo español ya tiene garantizada su presencia en la nueva Davis, en su condición de semifinalista de la actual edición, lo mismo que Croacia, Francia y Estados Unidos. España eliminó el pasado mes de abril en cuartos de final a Alemania en Valencia.

La idea original fue enmendada después de que algunos países -encabezados por Australia- se opusieran abiertamente a un torneo de 18 equipos en un sitio neutral, en gran parte debido a la pérdida de partidos en casa. La propuesta aprobada contempla que 24 equipos jueguen eliminatorias, de local o visitante en febrero, y los 12 ganadores pasen a la fase final. A estos se unirán los cuatro semifinalistas del año anterior y dos equipos por invitación.

La Copa Davis se disputa actualmente durante cuatro fines de semana en febrero, julio, septiembre y noviembre, y muchos de los mejores jugadores no participaron en los últimos años alegando programación excesiva en su calendario de competición.

Los equipos que lleguen a la final se ubicarán en seis grupos de tres y jugarán por el sistema de 'round robin' (todos contra todos), dos partidos de individuales y uno de dobles. Los seis ganadores de los grupos y los dos mejores segundos se clasificarán para cuartos de final.