El piloto español Fernando Alonso valoró su triunfo en las 24 Horas de Le Mans del domingo como "una de las victorias más importantes" de su vida, un mítica prueba en la que resultó clave en la noche a los mandos de su Toyota TS050 Hybrid número 8, al tiempo que valoró su intento de lograr una "súper triple corona".

"La Triple Corona sigue siendo un objetivo porque solo un hombre lo ha conseguido. También quiero ganar el Campeonato de resistencia, y tengo el campeonato del mundo de Fórmula 1, así que sería una súper Triple Corona", explicó el asturiano después de ganar su debut en Le Mans y lograr el segundo diamante de la 'Triple Corona', con el GP de Mónaco de Fórmula 1 y sin querer ponerse ya a pensar en su asalto a las 500 millas de Indianápolis.

"Tengo que pensar después del verano qué puedo hacer, pero hoy no quiero pensar, no quiero hablar de ello. Quiero disfrutar de este momento", apuntó sobre su posible regreso a Indy. Alonso, que quiere igualar e incluso mejorar el logro del inglés Graham Hill, reconoció que su victoria en Le Mans es un día "histórico".

Alonso valoró su remontada nocturna y el trabajo de los dos Toyota en el doblete. "Tuvimos un momento en la noche de desconcierto. Tuvimos un coche de seguridad y luego la penalización y nos vimos dos minutos y medio detrás, así que hubo un momento de pánico. Coincidió que me tocaba a mí en el relevo, de noche saco más rendimiento a los neumáticos", señaló.

El asturiano quiso repartir el mérito entre todos sus compañeros de equipo. "Me siento orgullos del trabajo hecho, de la preparación por llegar a un campeonato nuevo, a un coche nuevo, a un sistema nuevo y ser competitivo. Me siento orgulloso. Estoy en un equipo de pilotos que comemos juntos, que jugamos juntos a la Play, que jugamos a las cartas y el haber podido terminar con los dos coches es mérito de todos", finalizó.