El Adesal cierra este domingo su ciclo de partidos consecutivos en La Fuensanta ante el Ikasa Madrid a partir de las 13:00 horas. Sobre el papel, otro incómodo encuentro en el que sólo el hecho de jugar en casa le dará una ligera ventaja a la escuadra entrenada por Rafael Moreno.

Además, no sólo disputa su partido. También la fecha del 8 de diciembre está prevista para que el Roquetas y el Sanse resuelvan el partido pendiente por los compromisos internacionales de sus jugadoras de la especialidad de playa. Por lo tanto, se depurará de una vez la clasificación, a una semana de que acabe la primera vuelta de la competición.

De hecho, se da la circunstancia de que el equipo de La Fuensanta afronta el encuentro fuera del liderato que copaba el pasado domingo al cierre de la undécima jornada de Liga. Y es que ayer jugaron tanto Sanse como Bolaños y sacaron adelante los encuentros que tenían ante sí. Por lo tanto, el Adesal tiene que ganar para volver a los puestos de promoción.

Pero esa tarea no va a ser fácil viendo el recorrido que describe el Ikasa. El cuadro madrileño se ha asentado muy rápido en la competición hasta el punto de que tres de sus cuatro derrotas han sido con los equipos que están en el pulso por disputar fase de ascenso a Liga Iberdrola (Bolaños, Sanse y Roquetas), al tiempo que arañó un punto al Pozuelo.

En cuanto al Adesal, la semana ha ido minando al equipo en cuanto al número de jugadoras, circunstancia que va a reducir la rotación de Rafael Moreno. A la conocida ausencia de Gleynis Reyes, quien sigue por Japón en el Mundial y que, precisamente, afrontará mañana un encuentro de la President´s Cup con Cuba ante Australia, se suman otras tres y de peso. Asun Batista tiene un compromiso de balonmano playa que estaba incluido en su contrato y no forma parte de la convocatoria. Tampoco estará apta para el encuentro Noelia García y Maura Álvarez es seria duda. Por lo tanto, una prueba de carácter para el resto del equipo que tendrá que dar un paso al frente en una situación que puede entenderse como puntualmente crítica.