En los accesos de la senda peatonal de la ribera del río Genil, al final del Paseo Alfonso XIII, ya lucen letreros que advierten que está «prohibido arrojar basura y escombros bajo sanción. Atendiendo a lo establecido en la ordenanza de limpieza pública, recogida y tratamiento de residuos sólidos del término municipal de Palma del Río». Se trata de una campaña informativa de la delegación municipal de Medio Ambiente, cuyo concejal, Francisco Corral, indica que «arrojar basura es un delito contra el medio ambiente, las sanciones son muy graves, nadie quiere llegar a eso», aunque añade que «no hace ni 4 meses limpiamos esta ribera y ya la vemos otra vez convertida en un vertedero». Corral anuncia que se va a acudir a las sanciones y multas que contempla la ordenanza municipal, también dice que «montaremos algún dispositivo para que este tipo de actuaciones, nada cívicas, dejen de hacerse».

Para el responsable municipal de Medio Ambiente, la ribera del Genil es «una riqueza natural, es una suerte tener este espacio, tenemos que pensar en los vecinos que la usan, en los visitantes, es un sitio de paz y tranquilidad». Al mismo tiempo, señala que la zona está dotada de papeleras junto a los bancos.

Francisco Corral hacía estas declaraciones en una acción de conciención, donde desde concejales a efectivos de Protección Civil, técnicos y personal municipal, voluntarios y la implicación del grupo de acción medioambiental Grama, procedían «una vez más» a limpiar de los taludes de esta margen del río de botellas, plásticos y basura y escombros.

Una acción que bajo el título de Por un río limpio, vuelve a dejar este tramo del río Genil limpio. Recientemente también se actuó, en una convocatoria voluntaria y ciudadana, en el talud al Guadalquivir bajo la Ermita de Belén, y los senderos de las huerta de El Corvo y Las Delicias.

Desde Grama, subrayan la importancia de la educación, aunque afirman que «ha llegado el momento de sancionar, la población ha tenido advertencias». Proponen campañas de concienciación en centros educativos, cerramiento nocturno de espacios vulnerables, patrullas a pie en zonas verdes y control de residuos tras el mercadillo.

La concejala del grupo municipal del PP Matilde Esteo propone «una moción conjunta en materia de limpieza y medidas efectivas». Indica que «la población pide que se limpie la ciudad, solo en limpiar no está la solución».

Ya hay orden de sancionar, leves que van desde 50 a 300 euros, graves desde 301 a 600 y muy graves de hasta 1.200 euros. También se sanciona por no retirar los excrementos caninos y por el abandono de enseres, mobiliario y electrodomésticos en la calle.