Francisco Muñoz Algarrada, vecino de Palma del Río de 39 años de edad, perdía el domingo 22 de enero la vida cuando impactó con el vehículo que conducía contra un autobús en la carretera de Écija. Volvía a casa tras cubrir el turno de noche como recepcionista en un hotel-restaurante de la localidad sevillana. Un brutal choque frontal que dejó su coche, un Peugeot 306, hecho un amasijo de hierro y con el motor fuera de su habitáculo, en la cuneta de la carretera. A tan sólo 6 kilómetros de su casa, Francisco, casado y padre de un hijo, sufría el accidente mortal, calificado por muchos miembros del operativo policial, técnico y sanitario como «brutal y dantesco». El impacto se produjo con el lado frontolateral izquierdo del autobús, que llegó a perder la rueda. 16 Pasajeros del autobús tuvieron que ser atendidos por efectivos sanitarios in situ y en el centro de salud. El autobús procedía de Sevilla y se dirigía a una finca cercana.

Un amplio dispositivo daba cobertura al accidente. Guardia Civil, Emergencias Sanitarias, Policía Local y efectivos del parque de extinción de incendios de Palma del Río, que liberaron el cuerpo de sin vida del conductor del coche, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal en Córdoba.

El suegro del fallecido, José Padilla Castillo, manifiestaba que «mi hija al ver que no llegaba, siempre ha sido muy puntual e iba del trabajo a su casa, nos avisó de que su marido se retrasaba». Cuenta que junto a dos cuñados de la víctima, salieron a su encuentro y se encontraron con el trágico desenlace en la carretera. Agricultores de la zona, como Juan González Morales, de la finca Malpica, contaba que el impacto se escuchó en Arriel.

El 112 informaba del accidente, al parecer ocurrido antes de las 9 de la mañana, indicando que «una persona ha muerto y 16 han resultado heridas en una colisión frontal de un autobús y un turismo en Palma del Río».

Destacar finalmente que tras la llegada de la forense, los bomberos se afanaron en la excarcelación de la víctima mortal.