Quiero agradecer públicamente el servicio que me prestaron el pasado día 29 de marzo un dispositivo de agentes tanto de la Jefatura de la Policía Local como de la Comisaría de la Policía Nacional, que con su desinteresada y valiente acción, literalmente me «salvaron» de un apuro bastante grande cuando me perdí por la sierra cordobesa, haciendo deporte.

Llevo toda mi vida paseando y haciendo rutas de senderismo y jamás me vi envuelto en nada parecido, «gracias a Dios». Por suerte para mí, una patrulla conjunta de agentes de ambas comisarías, actuando conjuntamente, lograron encontrarme y «sano y salvo» llevarme de vuelta a casa.

No queriendo extenderme, les relato que sin querer me vi enredado en una zona de zarzas y matorrales, ya que me desvié por despiste del camino de vuelta a la ciudad, y no sabía salir ni para delante ni para detrás de ese sitio. Los nervios empezaron a aflorar y no daba con la solución, hasta que con el móvil pude contactar con una de las comisarías.

Desde el primer momento me trataron de forma espléndida, tratando de tranquilizar y calmar la situación, hasta que el grupo de humano de agentes llegara a mi situación, preguntándome si estaba herido o si necesitaba una atención urgente, viendo que realmente estaba más que nervioso.

Una vez que me localizaron -después de unas tres horas perdido- todo fueron amabilidades y muestras de ánimo. No hubo necesidad de acudir a ningún centro hospitalario aunque desde el primer momento esa fue la intención de los funcionarios.

Calmados los ánimos y respirando felizmente porque todo tuvo un buen final, amablemente me acercaron hasta mi casa, quedando eternamente agradecido a este grupo humano que merece el mayor de los agradecimientos y mi aplauso. En estos tiempos donde la palabra Gracias y los valores en los que en ella confluyen están un poco olvidados y como de bien nacidos es ser agradecidos, quiero mostrar desde esta persona humilde pero perpetuamente agradecida, que se siente orgulloso del trato, interés, dedicación y competencia que pude apreciar por las personas que me atendieron. Eternamente agradecido...

<b>Antonio Jiménez Roldán</b>

Córdoba