Seguro que es uno o dos

Presidente, ¡vuelve a acercarse un tsunami!, los técnicos dicen que la experiencia nos obliga a cerrar los puertos con urgencia y a evacuar a la población hacia el interior, es más, habrá que prohibir directamente la salida de diecisiete cruceros que están a punto de zarpar. Pero, ¡hombre!, ¿qué estás diciendo?, seguro que se tratará solo de una o dos olas grandes y aquí no van a llegar, no, tenemos que salvar el período vacacional, esa gente ya ha pagado sus hoteles en la costa, los pasajes de los barcos, lo mejor es que cada uno de los 17 cruceros decidan por sí mismos qué hacer y apelemos a la responsabilidad de los viajeros. ¡Presidente, vuelve a anunciarse un derrumbe en el rascacielos!, no es la primera vez, ya no da más de sí, recuerde que ya se cayó toda un ala la otra vez, los técnicos habrán de apuntalar, prohibir que la gente acceda a él y desalojar a los que estén dentro cuanto antes. Pero, ¡hombre!, ¿qué estás diciendo?, seguro que se trata sólo de unas grietas en una o dos terrazas, no podemos decir a las empresas y familias que ocupan los locales que se vayan, sobre todo salvemos la tranquilidad de la gente, lo que podemos hacer es que cada una de las diecisiete plantas del edificio decida lo que procede hacer y apelar a la responsabilidad de los inquilinos. ¡Presidente, la periferia está tomada por las bandas!, los barrios arden, la gente está desesperada, los jóvenes van cayendo uno tras otra en la droga, las familias no pueden más y dicen que pagan impuestos para que preveamos soluciones, y los técnicos nos piden medidas urgentes en el plano policial y social y, de momento, confinar la zona e impedir que los ciudadanos puedan verse en peligro. Pero, ¡hombre!, ¿qué estás diciendo?, no podemos abogar por la represión general cuando esto será cosa sólo de uno o dos casos, lo mejor es que las diecisiete comunidades de vecinos identifiquen con calma las circunstancias y apelen democráticamente a la responsabilidad de los vecinos, sin menoscabo de la libertad y la inserción de los infractores, claro. ¡Presidente, perdemos las elecciones! Pero, ¿qué dices?, si no paramos de salir en la tele.

* Escritor
@ADiazVillasenor