Miembro de un clan mafioso italiano, en concreto, hermano de un capo de la mafia de la localidad romana de Ostia, propinó un brutal cabezazo a un reportero de la RAI 2 cuando este preguntaba sobre el apoyo del clan a un partido ultraderechista. El deber profesional de informar comporta cada vez más riesgos, no solo en los países en guerra, sino en la aparentemente civilizada Italia.