Se celebra estos días en nuestra ciudad la duodécima edición de la convención nacional de Acade, la asociación que aglutina a los centros de enseñanza privada a nivel estatal, bajo el tema central de «Innovación, la transformación necesaria de la educación». Nos sirve este encuentro de llamada de atención, sobre todo, en la aplicación de las nuevas tecnologías al aula, la robótica y la internacionalización, sin perder de vista el pacto educativo o las nuevas exigencias formativas para la empleabilidad que demanda un mercado de trabajo en continuo cambio, con la aparición de nuevas profesiones y la reconversión profunda de muchas otras. Hace unos años, el boom del aprendizaje de los idiomas, del bilingüismo y los colegios internacionales se convirtió en el eje vertebrador de numerosos proyectos educativos. Y ahora es la adaptación a las nuevas tecnologías el marco de análisis y debate, de propuesta, que lidera los mayores esfuerzos de los centros escolares. Así lo acredita que en Valencia, en paralelo, se está celebrando el IV simposio internacional de mobile learning que organiza la Fundación Maecenas para tratar, en esta edición, la aportación de los nuevos métodos de evaluación analítica.

Sin duda todo un reto importante y necesario que merece los mayores esfuerzos, como lo atestiguó, hace tan sólo unos días, la nominación al llamado nobel de la educación del profesor español David Calle, quien comprendió las limitaciones de todo tipo para que muchos alumnos pudieran aprovechar las clases que impartía en su academia particular, trasladándola gratuitamente a Youtube, donde cuenta con más de cien millones de visitas y 700.000 suscriptores.

Los retos son numerosos, y no debemos perder de vista en la prioridad de nuestra tarea, abordar también el cambio en los modelos de familias y relaciones personales, así como los valores dominantes de nuestras sociedades. Además del aprendizaje desde las nuevas tecnologías, más allá de estas y los idiomas en que las utilicemos, fundamentalmente para ser felices y desarrollarnos plenamente como personas, necesitamos aprender a convivir y a respetarnos, hoy que asoman las xenofobias, se enquista la violencia de género, que se dan tantos casos de trastornos de conducta ó de ansiedad infantil, por no citar la alarma social existente por las situaciones de acoso. Desde un aprendizaje inclusivo, cooperativo, que desarrolle las inteligencias múltiples que atesoramos. Siempre he creído que la excelencia educativa pasa por personas excelentes. A la profesora canadiense Maggie MacDonnel le han concedido el citado nobel o Global Teacher Prize, por haber logrado un enfoque educativo integral para introducir dinámicas de vida más saludables entre la población y fomentar la implicación de sus estudiantes en la comunidad, logrando disminuir la altísima tasa de suicidios existentes entre los alumnos. Para enseñar a un alumno, lo primero es quererlo. Estos profesores y tantos otros, con su dedicación y ejemplo, nos muestran el camino a seguir.

* Abogado