La pobreza se define como la escasez o carencia de los recursos necesarios para poder satisfacer las necesidades básicas y poder vivir. En España la cantidad de personas cercana al umbral de la pobreza está en torno al 27,9%, casi 13 millones y de ellos 9 millones vive con menos de 684 euros al mes y más de un millón con apenas 342 euros. Pongamos ejemplos: el SOVI, pensión que cobran más de 331.000 personas tiene una cuantía de 381,21 euros al mes o la pensión media de los autónomos está en 638,17 euros al mes, eso sin hablar de los que perciben la pensión mínima que son una legión. Siempre son los mismos los afectados, los pensionistas. Un último informe dice que un 27% de estos españoles pobres viven en hogares con falta de luz, goteras, podredumbre en las paredes y suelo, además de que un 70% de los afectados no pueden sustituir los muebles viejos o estropeados y mucho menos ir al cine o espectáculos culturales. Desde que empezó la debacle laboral se ha llegado a cifras escandalosas: más del 82% de los pobres son trabajadores españoles y de estos la mayoría son mujeres con hijos a su cargo, familias que ahora están peor que antes de empezar la crisis y su pobreza raya en la indigencia provocando una humillación a toda la sociedad. No debemos consentir que ello suceda ya que los ricos en España aumentan exponencialmente, un 60%, y los pobres son cada día más pobres incluyendo a aquellos trabajadores que aun trabajando tienen salarios que los mantienen en esa situación de pobreza.