Encabeza la Plataforma de Mujeres Estibadoras, que ha ganado el pulso que mantenía con el Puerto de Algeciras, el único de España que no admitía a mujeres para manipular mercancías, a pesar de que con las máquinas ya no se precisa tanta fuerza física. Las empresas de la estiba han abierto una bolsa eventual de trabajo y cuatro mujeres se han incorporado. Buena noticia en este marzo tan feminista.