Con sus antológicos, increíbles bandazos, tanto «impolíticos» como ideológicos y estratégicos Pablo Manuel Iglesias ha sido el principal culpable visible del hundimiento de Podemos, más o menos dirigido por sus financiadores y/o chantajistas que condicionaron su «extraña» conducta.

Mucho contribuyeron a su ruina también su rival Errejón, su amigo servil Monedero y su enemigo rendido Echenique. Hoy destaca su actual pareja que le ha llevado, en un periodo clave, a hipotecarse con un Banco separatista por un coqueto «nido», le ha atiborrado de hijos que cambiaron --según ha confesado-- sus prioridades y ha tenido hasta el descaro de anunciar su pronto relevo por «una mujer», sin duda ella misma.