Vaya por delante una afirmación sentida y razonada: Córdoba necesita un aeropuerto que albergue vuelos comerciales. No puede seguir siendo la única ciudad española de su volumen poblacional y de su dimensión como objetivo turístico que carezca de vuelos regulares.

Partiendo de esa premisa, antes de hablar del futuro del aeropuerto, repasemos la historia para saber por qué estamos en la situación actual. Córdoba fue, en 1958 y gracias al tesón del alcalde Antonio Cruz Conde, la primera ciudad en contar con un aeródromo municipal, que luego pasó a propiedad estatal. Diversos factores fueron disminuyendo su uso. En esos factores no hay que olvidar la ausencia de la reclamación de un aeropuerto operativo y de nivel como un tema de ciudad, tanto por las instituciones como por los cordobeses en general. Aquí llegas a escuchar aquello de: "¿Para qué necesita Córdoba un aeropuerto teniendo cerca los de Sevilla y Málaga?".

La realidad actual es que desde el año 2006 el Gobierno de España ha invertido 86 millones de euros, tanto en expropiaciones (las famosas parcelas que fueron invadiendo el terreno del aeropuerto) como en reformas de la instalación. En 2013 quedó terminada la ampliación de la pista, requisito indispensable para albergar vuelos comerciales. Hoy nuestro aeropuerto recibe sin problema servicio de aerotaxis.

La parte más grande se ha hecho ya. Falta adecuar otras instalaciones, como puede ser el caso de la torre de control y el sistema AFIS, para permitir vuelos comerciales. Pero no tendría sentido en la coyuntura actual (crisis económica y descenso de operaciones aéreas hasta el punto de cerrar aeropuertos) seguir gastando un dinero en unos dispositivos que el aeropuerto cordobés no necesita ahora mismo. Habrá que recordar que el dinero público es preciso usarlo con sentido común.

En el momento que Córdoba atraiga vuelos comerciales, los "flecos" de su aeropuerto serán una realidad por parte del Gobierno. ¿Qué podemos hacer? Desde luego la iniciativa privada debe ser capaz de atraer viajeros en avión a Córdoba y las administraciones públicas dar facilidades y no utilizar el tema como arma política. Recordemos que AENA es el Gobierno de España, mientras Turismo es competencia de la Junta de Andalucía.

En este sentido, la Mesa de Coordinación Aeroportuaria, que convoca el Gobierno, es la competente para el desarrollo y potenciación de los aeropuertos andaluces a través de planes estratégicos, mientras que las mesas provinciales que ha creado la Junta son las responsables de atraer el turismo por vía aérea. Con la colaboración institucional, sintiendo los cordobeses su aeropuerto como necesario y superando la coyuntura actual de crisis, el futuro está ganado.

* Subdelegado del Gobierno en Córdoba