Lo de las cremas que llevan baba de caracol ya no suena a nuevo, pero el pegamento quirúrgico que ha desarrollado un grupo de investigadores de Harvard a partir del moco que segregan las babosas promete ser uno de los grandes inventos del año. La naturaleza ofrece «soluciones elegantes» señala uno de los autores del estudio, publicado ayer por Science. Según informa Efe, estos científicos norteamericanos han creado un adhesivo resistente, superfuerte y biocompatible que fija los tejidos «con una fuerza parecida a las propia resistencia del cartílago del cuerpo humano, incluso cuando está mojado», y que sellará mejor las heridas que provoca la cirugía.