El éxito de la moción de censura lo convirtió ayer en el séptimo presidente del Gobierno de España en la actual etapa democrática, y hoy mismo prometerá su cargo ante el Rey. Se abre una etapa política muy complicada, que Sánchez asegura que afrontará con «humildad» y mucho trabajo. Sus objetivos: regeneración democrática, estabilidad presupuestaria, compromiso con Europa y convivencia territorial.