La consejera de Agricultura de la Junta de Andalucía, Carmen Ortiz, aprovechó la presencia ayer, en Córdoba, del comisario europeo de Agricultura, Phill Hogan, para presentarle un plan para fomentar el relevo generacional en el sector agroganadero andaluz que se plantea a la Unión Europea como experiencia piloto. Las políticas europeas referidas al medio rural y al sector agrario han venido enfocadas a garantizar una producción alimentaria que permita el autoabstecimiento de la UE y, superados con creces esos requisitos, a evitar la despoblación de las zonas rurales, con lo que la propuesta de la Junta de Andalucía encaja con los objetivos de la UE. La idea es facilitar, mediante el proyecto Agri Hebe 2020, la incorporación de 2.020 jóvenes al campo a través de empresas de alta tecnología e innovación, es decir, reforzar la empresa agraria para que aporte más valor añadido y empleo de calidad. La UE debe dar el visto bueno a esta iniciativa, pues es necesario evitar la huida de los jóvenes hacia las ciudades.