Mala suerte. Según un estudio de elaborado por Allergeneat, las mujeres son más proclives a sufrir las consecuencias de las intolerancias alimentarias que los hombres, en una proporción del 64,5% para ellas y del 35,5% para ellos. Según el bioquímico Félix López Elorza, «hay 8 mujeres afectadas por histaminosis alimentaria no alérgica por cada hombre», y lo peor es que no se sabe el porqué. Sí hay un dato, y es que la histamina, una molécula que regula las funciones del estómago y cuyo exceso produce las intolerancias, se libera de forma masiva a causa del estrés.