Aunque para los partidos una campaña electoral sea la hostia, para la gente, sinceramente y sin ánimo de ofender, las campañas son un coñazo. Y es que se están convirtiendo en un decir lo que se quiere oír. También nosotros tenemos la culpa porque votamos a quien nos da pero no a quien nos exige. Y así, se han empeñado en parecer, más que políticos con planes, magos con magia. Miren si no al actual presidente Sánchez que en medio de una crisis inédita ahora maquillada con créditos europeos, predica por todas partes que subirá las ayudas de todo tipo. Es decir, mientras cruje el Estado del Bienestar, él dice que elevará todo tipo de prestaciones pero que no pasa nada. Vamos, un milagro de tío. Pero dejen a ese y cojan a Casado o Rivera. Estos dicen que el problema del problema catalán es que no se restablece el orden en Cataluña «como se debe». Y lo dicen así de panchos. Vamos, que los dos o tres millones de individuos que salen a las calles cada dos por tres pidiendo la independencia de Cataluña, se obvian y ya está (pero no dicen cómo); sin duda, abogan por un procedimiento milagroso. Ahora vamos al de Podemos que grita contra la casta y que los bancos no irán al Reino de los Cielos por malos que son y avariciosos, pero a la vez, se compra una casa de pijo con un préstamo bancario y pone como aval el pedazo de nómina que tienen él y su señora gracias a que se sientan ambos en el Congreso de los Diputados. En todo caso, el coletas (que no se pela porque parecerá ya pijo del todo) también predica que, por arte de magia, pondrá fuertes impuestos al banco, seguramente al mismo que le ha dado el préstamo para su chabola (¿pedirá también endurecer las condiciones de su préstamo? Pero es que el de Vox dice que quitará las comunidades autónomas incluidas supongo las históricas cuando sabe que solo es posible derogando una Constitución que a la vez piropea como ejemplo de reconciliación de las Dos Españas y de los nacionalismos periféricos. ¿En qué quedamos, Camarada Abascal? Y todos al unísono dicen que el problema de España es la baja natalidad, pero ninguno tiene familia numerosa para dar ejemplo porque consideran que tener familia numerosa es síntoma de irresponsabilidad y exclusión social. En fin, que todos lanzan milongas que nos las creemos pero que ellos no quieren para sí. Bueno, de ilusiones también se vive. Y se vota. Por tanto, ya puestos, por lo menos que propugnen algo que, aunque sea mentira nos ilusione mucho. Y además provocará millones de votos en un momento idóneo porque están los tres vivos y coleando y no me refiero a los políticos: que alguno se comprometa a que si llega a la Presidencia conseguirá organizar la última gira de Mecano.

* Abogado