Azahara López Carmona y Antonio Pacheco García, agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Lucena-Cabra, se llevan un meritorio aplauso por haber salvado la vida de un bebé que se encontraba inconsciente. Mientras su compañero pedía auxilio, la agente realizó a la niña la maniobra de Heimlich, que ejecutada perfectamente la liberó de una obstrucción y volvió a respirar.