Pensábamos que lo habíamos visto todo en el muestrario de los dirigentes del mundo del fútbol con la experiencia que vivimos en primera persona España al aparecer Jesús Gil y Gil por la presidencia del Atlético de Madrid y resulta que la Liga griega nos ha echado un paso por delante en la extravagancia. Todavía no se ha apagado el eco del presidente del PAOK de Salónica, Ivan Savvidis, acosando a un árbitro a la vez que exhibía una intimidatoria pistola, cuando aparece un nuevo mandatario que deja al desaparecido exalcalde marbellí en el escalafón de la inocencia. Evangelios Marinakis, presidente del Olympiacos, harto de malos resultados, ha decidido echar a toda la plantilla. Claro que con ese nombre era de esperar una penitencia.