Diríase que se propone ser el eterno «niño» caprichoso, pues ni siquiera una minuta de 2.000 euros por pinchar música dos horas fue suficiente aliciente para que el hijo de Isabel Pantoja cumpliera sus compromisos. El plantón que le dio a una sala de fiestas de Alicante, a pesar de que se encontraba en la ciudad, le costará una multa de 12.000 euros. Él puso una vaga excusa de salud.