Las actitudes racistas y homófobas son tan deplorables que resulta indignante que alguien las utilice para su beneficio personal. Aparentemente esto es lo que ha hecho el actor norteamericano cuando temía perder su papel en la serie Empire: simular haber sido golpeado e insultado en Chicago por dos hombres. La policía lo ha detenido, acusado de presentar una denuncia falsa.