La duquesa de Cambridge, Kate Middleton, no secundó el llamamiento que se hizo en la entrega de los premios del cine británico, los Bafta, para que todos los invitados vistieran de negro para dar visibilidad a la lucha contra el acoso de las mujeres en el cine. Middleton lució un vestido verde oscuro y recibió numerosas críticas por no sumarse a la propuesta. Desde la casa real británica se defiende que no pueden manifestarse públicamente sobre ningún asunto. Choca mucho esta respuesta cuando de lo que se trata es de luchar contra el acoso sexual y en defensa de los derechos de la mujer. Decisiones como ésta parecen alejar más a la corona británica de la realidad que vive la población en nuestros días.