Cada hombre en su noche

Así se titula, Cada hombre en su noche, una novela de Julien Green, por la que desfilan las tristes «noches» de tantos hombres de hoy: las víctimas de la guerra con su carga de cuerpos deshechos y de jóvenes y niños destrozados; las «noches» de las familias desmoronadas, de los condenados a las muertes del cáncer y del sida, de los atentados terroristas y de los gases venenosos; las «noches» de esa hambre endémica ocasionada por las brutales injusticias de nuestro mundo; las «noches» de los matrimonios rotos, de los profesionales sin trabajo, de las riadas en paro; las «noches» de las tristezas, del sin sentido, de la falta de horizonte, del aburrimiento y de la falta de ilusión, que quizás sea la noche que nos afecta más de cerca. Cada hombre en su noche, acertado titulo de una novela que mantendrá siempre su actualidad, que nos es otra que la del dolor lacerante y la injusticia penetrante sin más sentido que el daño, la destrucción y la muerte. Pero, junto a cada «noche» hay siempre una aurora de esperanza. La señalaba el Papa Francisco en su última audiencia -en la que recibió a nuestro obispo, Demetrio Fernández, en Roma-, pidiendo al Señor que nos conceda su espíritu «para vencer toda hipocresía y colocar en el centro de nuestra vida la verdad, que alimenta la solidaridad cristiana, y está llamada a ofrecer a todos el amor de Dios con obras concretas». A pesar de la noche oscura del hombre de hoy, «cada hombre en su noche», y a pesar de que nuestras siembras parecen quedarse sin cosecha, el Evangelio de la vida y la civilización del amor se nos ofrecen como buena noticia a los hombres de todas las épocas y culturas. «La verdad es una luz al alcance de todo aquel que la busca», proclamaba san Agustín. Y, por eso, el Papa en su audiencia señalaba la verdad como fundamento para vencer hipocresías y construir solidaridades. Hay mucho que hacer juntos, sin salirse de este viejo cielo y de esta vieja tierra. Por último, nos congratula ese «encuentro del Papa con nuestro obispo» en Roma, presagio de nuevas luces, proyectos y esperanzas.