El diccionario Oxford, que cada año incorpora nuevas palabras y expresiones, ha elegido, entre más de 200.000 candidatas, como expresión simbólica de 2017: «Fake news». Define el fenómeno global de fabricar y difundir por las redes noticias falsas con intención de transformar la realidad. Ya tenemos un nuevo fenómeno o una nueva plaga sobre el inmenso tablero de la comunicación. Los entendidos señalan que la primera oleda de FN, como se le denomina, «falsas noticias», se produjo durante la campaña electoral norteamericana que llevó a Trump al poder. Se originó en una ciudad de Macedonia (Veles), desde donde el joven rumano Ovidio Dobrota inundó las redes con mensajes que favorecían al republicano Trump y perjudicaban a su oponente demócrata Clinton, que era la gran favorita en las encuestas. Los técnicos no se ponen de acuerdo en señalar si las proyecciones demoscópicas eran erróneas o si el fabricante de FN logró cambiar en un mes la opinión pública estadounidense. Lo cierto es que, contra todo pronóstico, Donald Trump consiguió la victoria. El tema está en el candelero. Su importancia es enorme. Los analistas políticos no dudan en considerarlo como la más grave amenaza contra la democracia. Hasta ahora, se señalaban los populismos de extrema derecha y de extrema izquierda como dos fuertes peligros para la de democracia. Pero las «falsas noticias» la amenazan más gravemente que todos los populismos y las dictaduras. Frente a las dictaduras, siempre nos queda el castillo irreductible de nuestras íntimas convicciones: «Nunca fui más libre que durante la ocupación alemana», escribió Sartre en 1948. Frente a los populismos y fanatismos siempre nos queda la conciencia que nos culpabiliza en nuestro interior. Como bien ha señalado el analista Julián Abad, «las FN nos secuestran el juicio, la jerarquía de valores y la propia voluntad; clonan nuestras mentes su visión del mundo y sus escalas de valores». La plaga de las falsas noticias continúa avanzando. Si pensamos poco, y encima pensamos lo que los demás quieren, ya vemos los resultados.

* Sacerdote y periodista