El escritor, ensayista y diplomático español Max Aub (aunque nacido en París, vivió en Valencia, adonde se trasladaron sus padres en 1914, al estallar la Gran Guerra) cuenta con una placa en la Embajada de España en París, un reconocimiento a su labor como agregado cultural en Francia entre 1936 y 1937, cuando entre otras cosas encargó a Picasso que pintara el Guernica. Aunque muy olvidado hoy, no solo convenció a Picasso de que hiciera su famoso cuadro por encargo de la República, sino que coordinó la realización del pabellón de España en la Exposición Internacional de 1937 en París. Tras la guerra civil se exilió a México y solo pudo volver a España en 1969.