Estamos viviendo todavía los primeros compases de este año nuevo, que comienza ya a enfrentarnos con la dura prosa de la realidad. Cada cual tiene su misión, es cierto, y la de escribir en unas páginas de opinión no deja de ser una tarea apasionante aunque difícil, sobre todo cuando uno es consciente de que tiene la obligación de depositar siempre en sus líneas una semilla de verdad, un temblor de espera, un resplandor de sabiduría para dar un poco de color y de calor a cada jornada. Luis Borgesnos ha transmitido en uno de sus libros la visión de su propia persona y lo que podemos hacer ante los problemas y las situaciones más difíciles: «No puedo darte soluciones a todos los problemas de la vida. No tengo respuestas para tus dudas o temores. Pero puedo escucharte y compartirlas contigo. No puedo cambiar ni tu pasado ni tu futuro, pero cuando pueda estaré a tu lado. No puedo poner fin a tu sufrimiento, pero puedo llorar contigo. No soy gran cosa, pero soy todo lo que puedo ser». Precioso el mensaje de Borges, cuando estrenamos agenda y queremos caminar avanzando y progresando. Sí, quizás no sepamos dar soluciones o respuestas decisivas; no podremos influir en la existencia de quien nos lea; ni tampoco enjugar lágrimas y hacer que afloren sonrisas. Pero sí que podremos ser, en los pocos minutos de la lectura de estas líneas, compañeros de viaje de nuestros lectores, compartiendo las mismas preguntas, participando en las mismas experiencias de dolor y de alegría. Tambien, cada uno de nosotros, podemos colocar en nuestros labios, las palabras del escritor: «No soy gran cosa», pero trataré de ser con vosotros «todo lo que puedo ser». En la vida no hay fórmulas mágicas, ni soluciones fáciles a problemas difíciles. Pero sí que existen «voces valiosas», «acompañamientos enriquecedores». Y sobre todo, manantiales de sabiduría, «palabras de vida eterna», que escuchadas desde la orilla de la fe, pueden convertirse en horizontes de luz y de verdad. «Escuchar y compartir» puede ser un eslogan eficaz para afrontar los retos del año que acabamos de estrenar.

* Sacerdote y periodista